El sindicato de taxis, representado por el dirigente sindical Edgar García, expresó su preocupación ante la inminente aprobación para regularizar plataformas como Uber y Cabify.
El sindicato de taxis de Canelones concentró vehículos frente a la sede principal de la Intendencia de Canelones para manifestar su malestar por la posibilidad de que la Junta Departamental apruebe, con votos del Frente Amplio, la cuota departamental que habilitaría a las aplicaciones de transporte.
García sostuvo que esta decisión “perjudica literalmente” al sector, ya que aún no se han corregido las irregularidades que afectan al sistema. “Estamos haciendo todo lo posible para que no se apruebe, poniendo nuestro capital humano sobre la mesa para buscar soluciones y mejorar la profesionalidad de los choferes".
García cuestionó que la Intendencia no haya logrado controlar la informalidad en los últimos 15 o 20 años. “No han podido fiscalizar los autos truchos porque no hay capital humano suficiente. Se sacaron algunas chapas y se detuvo a algunos particulares, pero nunca se hizo el 100%. Eso nos perjudicó, y ahora pretenden regularizar Uber y Cabify, mientras siguen circulando vecinos con autos particulares por fuera del sistema”, afirmó.
Expresó García que “el sindicato planteó a la Intendencia la necesidad de formar un equipo de fiscalización para detectar irregularidades en todo el departamento”.
“Primero hay que sacar todo lo trucho y luego evaluar la oferta y la demanda de viajes. Recién después se podrá abrir un diálogo serio con la Intendencia”, advirtió.
Consultado sobre la posibilidad de integrar una mesa de diálogo tripartita con la Asociación de Trabajadores de Aplicaciones, García fue enfático: “Nosotros no vamos a entrar en diálogo con las aplicaciones, no queremos tener nada que ver con ellas. El trabajador de aplicación es trabajador igual que nosotros, pero debería buscar regularizarse en otro lado”.