La Intendencia de Montevideo empezó días atrás a sancionar a los vehículos estacionados en veredas o bicisendas, medida incluida en el plan Montevideo más ágil.
La multa vigente es de tres unidades reajustables, equivalentes a $ 5.517. Previo al inicio de las penalizaciones, la comuna había realizado una campaña informativa encabezada por inspectores de tránsito, a fin de explicar la normativa y el alcance del control.
La fiscalización se centra en veredas de menos de 5 metros de ancho, donde se aplicará un control estricto, incluidos accesos a garajes y estacionamientos. También se supervisan bicisendas y senderos peatonales. En veredas de mayor amplitud, se verificará que exista un corredor libre de dos metros entre los autos estacionados y la línea de propiedad del padrón, para asegurar la circulación y la accesibilidad.
La Intendencia de Montevideo recordó que ocupar veredas y sendas peatonales como estacionamiento afecta la seguridad vial y el uso adecuado del espacio público.